Conoce las 3 tendencias en sostenibilidad en las operaciones logísticas que marcarán el 2025

La sostenibilidad es una pieza fundamental en las operaciones logísticas de los nuevos tiempos y no solamente porque muchas de las acciones asociadas generan un impacto al medio ambiente sino porque aportan en la eficiencia operativa. El transporte, en cualquiera de sus modos, es fuente de emisiones de gases contaminantes y por esa razón uno de los puntos centrales tiene que ver con la generación de energías limpias y el uso de la electricidad.

Por otra parte, es una forma de ahorro en el largo plazo, toda vez que al adoptar medidas de este tipo como la optimización de rutas y la digitalización puede reducir costos de manera significativa. Además, existen normas regulatorias que obligan a ocuparse del tema como la Ley REP (Responsabilidad Extendida del Productor) donde los productores se hacen responsables de los residuos que generan, incluso una vez que fueron vendidos y consumidos.

Durante este 2025 existen tres tendencias de sostenibilidad que serán claves en el futuro de las operaciones logísticas: la descarbonización del transporte, la logística circular y empaques sostenibles, y la digitalización y trazabilidad ecológica.

1. Descarbonización del transporte

Cada vez es más común el uso de vehículos eléctricos y combustibles alternativos. La mayoría de las flotas de transporte terrestre y marítimo están migrando hacia la electromovilidad y el hidrógeno verde. Además, la Inteligencia Artificial llegó para apoyar en la optimización de rutas con algoritmos avanzados que permiten reducir las distancias de recorrido para las entregas, evitar los tiempos de espera y ahorrar combustible.

En el mundo, empresas como DHL han implementado objetivos como GoGreen que busca llegar a las cero emisiones para el año 2050 invirtiendo en vehículos de reparto eléctricos y aviones más sostenibles. En tanto, Amazon informó la adquisición de 100 mil furgones eléctricos para sus entregas en Estados Unidos en la búsqueda de la reducción de la contaminación.

En Chile, Maersk y Sotraser se comprometieron para apoyar la descarbonización incorporando vehículos eléctricos en todas sus operaciones. De esta manera, dispondrán de dos tipos de camiones eléctricos: el Volvo FH Electric y FM Electric, equipados con baterías de 540 kWh que ofrecen una autonomía aproximada de 300 km por carga, y Foton EAuman 2554 que cuenta con una batería de 350 kWh que alcanza una autonomía cercana a los 220 km por carga y que pueden transportar entre 24 y 25 toneladas de carga, una cifra que respeta los límites de peso bruto y por eje establecidos por la legislación chilena.

2. Logística circular y empaques sostenibles

La disminución del packaging y el uso de biodegradables con el objetivo de utilizar empaques más livianos, reciclables y compostables son parte de los objetivos de algunas empresas para reducir la huella de carbono. Además, las estrategias "Zero Waste Warehouses" que nació en la década del 2010 pero que tomó fuerza hace un par de años permitiendo que gran cantidad de compañías reporten a través de métricas los residuos que se han evitado ya sea separándolos o reutilizándolos.

La empresa deportiva Nike tomó la iniciativa e implementa desde hace algún tiempo el programa "Move ti Zero" utilizando cajas de cartón limpias, sin tinta y sin cintas plásticas para que sean 100% reciclables. En nuestro país, en el 2024 el Acuerdo de Producción Limpia (APL) de Corfo y la Cámara de Comercio de Santiago incluyó a más de 40 empresas para establecer un compromiso para la circularidad de los embalajes en el e-commerce para apoyar la reutilización y reciclabilidad de los desechos.

3. Digitalización y trazabilidad ecológica

La adopción de la tecnología en las operaciones logísticas motivó el uso de la Internet de las Cosas (IoT) y los sensores inteligentes para monitorear en tiempo real cuánta energía consumen las empresas, además de las emisiones que se generan en cada una de las actividades de transporte de mercancías. Esta digitalización permite elaborar reportes exactos para cumplir con los objetivos trazados en esta materia.

En la industria marítima, Maersk utiliza plataformas digitales para realizar un seguimiento estricto de las emisiones contaminantes en cada una de sus rutas y embarques. Además, para apoyar con este objetivo iniciaron las operaciones con biocombustibles y metanol en algunas rutas, generando además corredores marítimos verdes para promover la descarbonización del transporte marítimo.

En nuestro país, la plataforma ConectaRecicla aporta en la gestión de los residuos reciclables conectando a todos los actores de la cadena de valor, desde la generación hasta la valorización final, optimizando tus procesos, reduciendo costos y contribuyendo a la sostenibilidad. El uso del blockchain para la trazabilidad es clave para aportar en este objetivo que aporta a la economía circular y la gestión de residuos que se encuentran dentro de las normativas de la Ley REP.

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