Logística y Distribución
Antofagasta y los planes para descongestionar la cadena logística
En el marco del Plan de Logística Colaborativa impulsado por el Ministerio de Transportes, el Puerto de Antofagasta impulsa una gestión más eficiente del flujo de carga, buscando reducir la congestión de camiones entre La Negra y el frente marítimo, optimizar la coordinación operativa y reforzar la sostenibilidad del movimiento portuario en la ciudad.
La coordinación logística en Antofagasta entra en una fase decisiva con nuevas iniciativas impulsadas por Empresa Portuaria Antofagasta (EPA) y el Grupo Ultramar, que buscan enfrentar un problema estructural: el paso obligatorio de camiones por el centro urbano para acceder al puerto. Las medidas apuntan a disminuir los tiempos de espera, ordenar los flujos y reducir el impacto de la actividad portuaria en la ciudad.
Oscar Novoa, jefe de Inversión y Nuevos Negocios en EPA, explica que el desafío parte por la ubicación estratégica, y compleja, del terminal. “El puerto de Antofagasta está en el centro de la ciudad. Tenemos que cruzar toda la ciudad, ya sea por el norte o por el sur, para poder ingresar.”, señala. Añade que la coexistencia entre la actividad logística y los servicios urbanos es especialmente sensible.
Según el ejecutivo, la empresa portuaria trabaja en cuatro líneas de acción: una corresponde al Plan de Logística Colaborativa y las otras tres están directamente vinculadas al transporte y acceso portuario. “Primero, para ayudar en el tema de la congestión, está la modificación de una de las calles”, afirma y agrega que a esto se suma la gestión para reducir vehículos mal estacionados y descongestionar el tránsito de camiones. Un cuarto eje apunta a estandarizar los procesos de acreditación para que la documentación de trabajadores y operadores sea la misma para todos y evitar duplicidades.
Desde el sector privado, ULOG -filial logística del Grupo Ultramar- también empuja un cambio estructural en la operación diaria. En ese sentido, Francisca Caballero, Key Account Manager de la compañía, destaca que la iniciativa es disminuir los tiempos de espera de los camiones en el acceso portuario. El diagnóstico es claro: “esta iniciativa nace del atochamiento de camiones en Antofagasta porque, el puerto pasa en medio de la ciudad”.
Francisca Caballero detalla que la problemática se extiende a La Negra, nodo industrial clave para la zona. “La idea es mejorar la coordinación logística entre el origen -las bodegas de La Negra- y el destino final, que sería puerto. No solo es ULOG sino varios actores de la industria con sus bodegas”, explica y sostiene que cuando esa coordinación falla se generan cuellos de botella ya que los camiones se acumulan en ciertos puntos y se genera un caos vial.
Ante esto, ULOG y la Empresa Portuaria Antofagasta conformaron una mesa conjunta con Antofagasta Terminal Internacional para levantar información precisa. “Determinamos generar KPIs que nos muestren dónde se atochan más los camiones, en qué puntos hay demoras y qué factores están causando estos retrasos. La idea es trabajar con datos reales, no con suposiciones”, afirma Caballero.
Una operación reciente dejó en evidencia la urgencia de contar con métricas en tiempo real. “Recibimos una nave de 19 mil toneladas de ceniza de soda que había que transportar desde el puerto hasta La Negra. ULOG fue el único operador logístico que debía coordinar los 53 equipos necesarios para hacer el circuito continuo, sin que faltara flota”.
Francisca Caballero agrega que, sin embargo, aparecieron los imprevistos donde el mayor problema fueron los fuertes vientos, algo imposible de controlar. Relata que cuando paraba la operación, se generaba alta acumulación de camiones, ya fuera en puerto o en el punto de descarga. La falta de coordinación generaba efectos en cadena. “En vez de ir dos, tres o diez equipos en circuito, finalmente iban los 53 de un punto a otro. Eso nos generó detenciones de 20 a 30 minutos”, precisa Caballero.
Esa ineficiencia tuvo costos directos con “retrasos, costos operativos y un uso ineficiente de los equipos”. Finalmente, un problema en toda la cadena logística y por eso, el foco está puesto en los indicadores críticos y en la generación de protocolos operativos basados en evidencia. “Queremos identificar exactamente dónde están los puntos más críticos para plantear soluciones concretas”, explica.
La meta es diseñar respuestas coordinadas para escenarios de interrupción, como los episodios de viento. “Queremos armar protocolos, implementar un sistema de avisos, mejorar la comunicación entre el puerto y ULOG, y así tener una operación más eficiente, con menores costos y menor atochamiento de equipos en la ciudad y en el puerto”, sostiene.
Para Puerto Antofagasta este tipo de colaboración muestra un cambio en la cultura logística local y se enfatiza que la estandarización documental y la gestión conjunta son pasos que pueden aliviar problemas que son históricos. Así, el trabajo conjunto entre EPA, ATI y ULOG busca, en definitiva, instalar un modelo de gestión basado en datos, interoperabilidad e información compartida. Con ello, la ciudad podría ver una reducción en la congestión asociada al tránsito de camiones, mientras la cadena logística mejora su capacidad de respuesta frente a contingencias.
Las próximas semanas serán clave para consolidar los KPIs y definir las primeras medidas operativas. Tanto la Empresa Portuaria Antofagasta como ULOG coinciden en que la única manera de sostener el crecimiento portuario en una ciudad densamente urbanizada es anticipar los flujos y actuar con coordinación total. Así se generará una operación más eficiente, con menores costos y menos atochamiento.