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Marítimo Portuario

Ley de cabotaje: Entre impulso al comercio y defensa de la industria nacional

La nueva ley incorpora criterios de seguridad y soberanía nacional.

Mientras el Gobierno y parte importante del sector portuario destacan su impacto en la eficiencia logística y la reducción de costos, parlamentarios de la zona sur como el senador Alejandro Kusanovic advierten riesgos para la marina mercante chilena y la soberanía en el transporte marítimo.

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Durante más de una década, Chile debatió la apertura y modernización del cabotaje marítimo, un sector clave para la conectividad interna y la competitividad logística del país. La regulación vigente, establecida en la Ley de Fomento a la Marina Mercante y la Ley de Navegación, restringía la operación en aguas nacionales principalmente a naves de bandera chilena, lo que limitaba la competencia y elevaba los costos de transporte entre puertos locales.

El proyecto de modificación -impulsado por el Ministerio de Transportes y Telecomunicaciones junto al Ministerio de Economía- busca equilibrar esa apertura con la protección de la marina mercante nacional, introduciendo mejoras normativas que promuevan la eficiencia operativa, la sostenibilidad ambiental y la reducción de tarifas. Su discusión se enmarca en la necesidad de fortalecer la red de transporte marítimo como alternativa al sobrecargado sistema terrestre y avanzar hacia un modelo logístico más multimodal y competitivo.

De esta manera, y tras largo tiempo en el Parlamento, con 113 votos a favor, 4 en contra y 2 abstenciones, la Cámara de Diputados y Diputadas aprobó el proyecto que modifica la Ley de Fomento a la Marina Mercante y la Ley de Navegación. Entre los principales impactos se proyecta una reducción de entre un 19% y un 39% en las tarifas de flete de contenedores y costos asociados, lo que representa un ahorro estimado de 267 millones de dólares anuales. Asimismo, se espera un fortalecimiento de la actividad portuaria en el norte del país y una mayor oferta de transporte terrestre de corta distancia, con especial beneficio para las MiPymes importadoras y exportadoras.

Por otra parte, la nueva ley también incorpora criterios de seguridad y soberanía nacional, tras un proceso de revisión en conjunto con el Ministerio de Defensa y la Armada. Con su aprobación, la norma queda lista para su promulgación por el presidente de la República y posterior publicación en el Diario Oficial, marcando un avance clave en la modernización del sistema marítimo y logístico chileno.

Los contenedores de comercio exterior lo siguen siendo durante todas las transferencias.

“Hoy es un día histórico para nuestro país, ya que después de 13 años, por fin Chile contará con una ley que moderniza y regula las normas de navegación, que permitirá el ingreso de inversión extranjera en el transporte de cargas, pero que protege el cabotaje de las naves nacionales, principalmente aquellas que operan en el extremo sur”, señaló -tras conocer la aprobación por parte de la Cámara- el ministro de Transportes y Telecomunicaciones, Juan Carlos Muñoz, uno de los principales promotores de la iniciativa.

Agregó que esta nueva ley “impulsa la economía y fortalece el empleo de nuestros connacionales, pero también es un paso importante en la preservación del medio ambiente, ya que el transporte marítimo es casi un 70% más sustentable que otros modos”.

En tanto, el ministro de Economía, Álvaro García, indicó que "esto es una gran noticia para la economía chilena, una buena noticia para los exportadores e importadores, pero también para los bienes que compran los chilenos en el país, cuyo precio se van a ver disminuidos por el menor costo de transporte que tendrán. Es también una gran noticia para el empleo, porque vamos a tener más industrias de transporte marítimo instalada en Chile. Eso es precisamente lo que logra esta ley, fortalecer el crecimiento y traer más fuentes de empleo para chilenos y chilenas".

Mientras, la Cámara Marítima y Portuaria de Chile (Camport), destacó la aprobación toda vez que “Chile es un país abierto al comercio exterior, donde más del 90% de nuestras exportaciones e importaciones se movilizan por vía marítima. Este proyecto establece que los contenedores de comercio exterior lo siguen siendo durante todas las transferencias y trasbordos que se realicen en puertos chilenos, mientras no sean desaduanados”.

“Con ello se evitan los transbordos y almacenaje en puertos fuera de Chile, como Callao en Perú, lo cual representa un impacto positivo para exportadores, importadores y consumidores, quienes podrán acceder a servicios más competitivos y a menores precios, aumentando con ello la competitividad del país. La aprobación es un avance para la promoción de un desarrollo logístico eficiente para el país, sin embargo, aún queda mucho por hacer en este campo”, concluyó la Camport a través de un comunicado.

La importancia estratégica de la Ley de Cabotaje

Por su parte, la diputada por el Distrito 7 de la Región de Valparaíso, Camila Rojas, sostuvo que "la aprobación de la ley de cabotaje es una buena noticia para nuestro país porque moderniza el transporte marítimo, fortalece la actividad portuaria en su conjunto. Los puertos de Chile son estratégicos para la economía nacional porque por ahí pasan las importaciones y exportaciones, sin contar el empleo de miles de chilenas y chilenos que sostienen esta cadena logística”.

La parlamentaria explicó que “todo lo que tiene que ver con los puertos me preocupa y por eso impulse la creación de una comisión permanente de asuntos portuarios en la Cámara que permita discutir con mayor profundidad los temas laborales, de seguridad e infraestructura para avanzar hacia una institucionalidad portuaria que no esté atomizada como actualmente lo está. Además, hemos impulsado el royalty portuario porque no basta con fomentar la eficiencia, sino que también los beneficios portuarios tienen que quedarse en los territorios donde se emplazan”.

Para algunos la nueva ley es clave porque moderniza el transporte marítimo.

En tanto, Hotuiti Teao, diputado por el Distrito 7 de la Región de Valparaíso, valoró la modernización del cabotaje marítimo porque "Chile necesita reglas claras para mover su carga entre puertos sin perder empleo ni soberanía. Este proyecto ordena el cabotaje, mantiene la preferencia por naves chilenas y cuando la oferta nacional no alcanza establece excepciones estrictamente reguladas y fiscalizadas con procedimientos más simples, plazos ciertos y publicidad de itinerarios y resoluciones".

Recordó que la implementación es responsable y gradual. "Las reglas más sensibles entran en vigencia diferida por tres años en Los Lagos, Aysén, Magallanes y la Antártica donde el marco tendrá efectos concretos en comunidades y puertos. En San Antonio impulsa licitaciones claras y reclamos expeditos, en Valparaíso mejora la planificación puerto-ciudad y reduce costos logísticos, mientras que en Rapa Nui asegura continuidad de servicios con instrumentos específicos", dijo el parlamentario.

Para el director del Magíster de Administración Marítimo-Portuaria de la Universidad de Valparaíso, Sergio Bidart, la aprobación de esta ley “es una buena noticia porque mientras más se abre el mercado, más beneficios tiene para todo lo que es el transporte de carga dentro del país porque hoy en día estamos haciendo casi todo en camiones así que mientras más actores ingresen es mejor. Sin embargo, para los que está adentro y que lleguen actores nuevos va a ser complejo porque se produce la competencia y lo que va a pasar es que se va a equilibrar el mercado”.

Diferente opinión la del senador por la Circunscripción 15 de la Región de Magallanes y de la Antártica Chilena, Alejandro Kusanovic, quien manifestó du descontento con esta nueva ley que se aprobó en el Congreso. "Es muy lamentable lo que ha pasado en el Parlamento -en el Senado y la Cámara de Diputados-, que terminen aprobando esta reforma a la Ley de Cabotaje porque el cabotaje es una industria nacional del transporte de carga y pasajeros en el territorio chileno, por lo tanto, toda actividad que se desarrolle dentro de esta área es una actividad que tiene que estar suscrita a las leyes de Chile y lamentablemente acá lo que han hecho es permitir que leyes de otros países actúen dentro del territorio nacional lo que no puede ser”.

Agregó que “acá se ha solucionado mal el problema, se ha hecho un mal diagnóstico y una pésima solución. Lo que había que hacer era una ley de fomento de la marina mercante, una ley de fomento de la industria del transporte marítimo donde veamos por qué nuestra industria no es competitiva, si es que hay que hacer una bandera de conveniencia para poder competir. Había que hacer un análisis mucho más profundo, pero no destruir una industria chilena para favorecer a otra. Es vergonzoso y me recuerda a las palabras de Cristo que decía: "perdónalos porque no saben lo que hacen". Ese es el tema, no entienden lo que están haciendo”.