Logística y Distribución
Visibilidad logística: clave para una cadena de suministro ágil y resiliente

Un informe de Maersk destaca que la visibilidad logística avanzada, mediante paneles en tiempo real, análisis predictivos y alertas proactivas, permite a las cadenas de suministro anticipar interrupciones, optimizar recursos y fortalecer la confianza con clientes, impulsando una gestión más ágil, eficiente y resiliente en un entorno global cada vez más complejo.
La visibilidad logística trasciende el simple rastreo de envíos, permitiendo acciones en tiempo real que mejoran la toma de decisiones en toda la cadena de suministro. Así lo revela un reciente informe de Maersk, que destaca cómo la combinación de datos, tecnologías predictivas y alertas proactivas está transformando la gestión logística global.
El informe subraya que la visibilidad real implica disponer de la información, los socios y las herramientas adecuadas para intervenir de forma decisiva ante cualquier eventualidad. Esto se traduce en una reducción de sorpresas y en la capacidad de resolver problemas antes de que se agraven, mejorando la agilidad y la eficiencia operativa en cada etapa, desde el manejo del inventario hasta la entrega final.
Uno de los pilares fundamentales de esta transformación son los paneles de control en tiempo real. Estas plataformas consolidadoras de indicadores clave de rendimiento (KPI) —como productividad, avance de pedidos, niveles de inventario y estado de embarques— facilitan la toma de decisiones informadas y rápidas. Así, permiten identificar cuellos de botella y reasignar recursos para mitigar impactos operativos de forma inmediata.
Los datos respaldan este enfoque. Según McKinsey, las empresas que digitalizan agresivamente su cadena de suministro y adoptan paneles en tiempo real pueden aumentar su EBIT hasta un 3,2% anual, la mayor ganancia entre todas las funciones empresariales. No obstante, solo un 2% de los ejecutivos priorizan actualmente esta transformación, lo que revela una brecha entre la oportunidad y su ejecución.
Además, el análisis de Gartner resalta que estas herramientas no solo optimizan la eficiencia operativa, sino que elevan el nivel de servicio al cliente y fortalecen la resiliencia frente a interrupciones. Los paneles en tiempo real permiten anticipar retrasos, automatizar respuestas y mantener los estándares de servicio incluso bajo presión.
La segunda tendencia que destaca el informe de Maersk es el uso creciente de análisis predictivos para la planificación de inventarios. En un entorno marcado por la volatilidad y cambios en la demanda, el aprendizaje automático y el modelado estadístico permiten anticipar picos, ajustar niveles de inventario y reducir riesgos asociados a proveedores y variaciones del mercado.
Gartner indica que las compañías de alto desempeño integran estas tecnologías directamente en sus flujos operativos, mejorando la precisión de las previsiones en un 20-30% y reduciendo hasta en un 25% el exceso de inventario, sin comprometer el nivel de servicio. Sin embargo, menos del 25% de las organizaciones reporta mejoras significativas, evidenciando que el desafío no es solo tecnológico sino de integración y alineación estratégica.
El análisis predictivo también apoya la gestión proactiva de riesgos, permitiendo identificar productos de baja rotación, anticipar interrupciones y evaluar la fiabilidad de proveedores. De este modo, la cadena de suministro se vuelve más inteligente y resistente, convirtiendo la incertidumbre en una ventaja competitiva.
Finalmente, el informe enfatiza la relevancia de las alertas y actualizaciones proactivas para fortalecer la confianza con los clientes. Informar en tiempo real sobre posibles desviaciones genera transparencia y reduce incertidumbres, elevando la satisfacción y fidelización. McKinsey destaca que estas tecnologías combinadas con ajustes operativos pueden mejorar notablemente los niveles de servicio y la retención de clientes.
En resumen, la visibilidad logística, potenciada por paneles en tiempo real, análisis predictivos y comunicación proactiva, es el factor diferenciador para que las cadenas de suministro se adapten y prosperen en un mercado global complejo y dinámico, tal como evidencia el informe de Maersk. Esta evolución demanda un cambio cultural hacia la gestión activa y ágil, clave para alcanzar altos estándares de desempeño y competitividad.